Finalmente y después de algunos días de dimes y diretes entre el gobierno federal y el sindicato de electricistas, el presidente cierra la compañía estatal eléctrica y para mi no había otra opción, pues era una empresa pésima que estaba endeudadísima que no contaba ni con el personal ni el equipo necesario para seguir operando.
La culpa es tanto de los gobiernos federales y el sindicato, como casi en todas las empresas estatales que siempre son vistas como fuentes de riquezas más que de desarrollo para el país.
Hay muchísimos casos de gente a la que le llegaban recibos de $200 y a otro día de $500,000 y ni modo había que pagarlos y ya después investigaban. En mi caso no pagamos en la casa un recibo y vinieron a cortar la luz, pero el trabajador pues quería su dinero para no cortar la luz y se puso como loco cuando le dije que no era justo que si les debíamos vinieran en menos de 5 minutos a cortar la luz pero el día que se fue el servicio en la colonia, nos tuvieron sin luz 24 horas, nada más porque no tenían el material para cambiar los cables; y para cuando pagamos el recibo la reconexión de 8 días la vinieron a hacer de 15. Igualmente había cortes de 2 a 5 minutos unos 15 días y ni como quejarse o cambiar de compañía.
Así que me pregunto quien va a meter las manos al fuego por la compañía y por el sindicato y si se va a hacer lo mismo con los demás sindicatos que tienen secuestradas a las empresas mexicanas estatales y al desarrollo del país.
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